Llega el tiempo de su cuarto aniversario que llevan juntos y Anna no puede parar de pensar en el matrimonio. Ella lo que hace es plantearse como podría pedirle la propuesta de matrimonio a su novio Jeremy ydecide tomar cartas a este asunto. Anna viaja a Dublín para pedirle algo especial a su novio. Lo tiene pensado hacerlo en vista a una tradición irlandesa, en la cuál sólamente un día cada cuatro años una mujer puede pedirle matrimonio a su novio con la certeza primero de que éste seguro contestará que si. Pero, el ambiente de clima y el destino de Anna harán que aparezca en el otro extremo de Irlanda y necesita contar con la ayuda de un muchacho para cruzar el país. Al pasar mucho tiempo juntos descubren que el camino hacia el amor puede llevarte a lugares muy inesperados.
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